Una sorprendente isla en el Mediterráneo
Frente a la costa murciana en medio del mar Mediterráneo encontramos una isla que se puede ver perfectamente desde cualquier punto de La Manga del Mar Menor. Se trata de una isla de origen volcánico que se conoce como isla Grosa y que antiguamente fue una zona militar utilizada para el adiestramiento de las unidades especiales de buceadores de combate y de desactivación de explosivos del Centro de Buceo de la Armada.
La verdad es que ni yo misma estaba demasiado segura de qué es lo que me iba a encontrar si iba a la isla ya que solamente la conocía de verla desde la orilla de La Manga del Mar Menor y, todo sea dicho, desde tierra no parece que sea muy interesante.
Al final un día de verano decidí hacer una excursión en barco a isla Grosa pensando que como mínimo me llevaría el buen rato de ir de paseo en barco. Lo que no me esperaba era que me gustase tanto que antes de que acabara el verano volvería a hacer la misma excursión para volver a ver la isla.
La primera vez que fui fue un día por la mañana y la segunda vez fue por la tarde, lo que me permitió disfrutar de un atardecer en medio del mar y junto a la isla. En ambas excursiones me quedé sorprendida con la cara de la isla que queda oculta si miramos desde la orilla, ya que es totalmente diferente a la cara que se ve desde tierra. La cara oculta es bastante más rocosa y desigual y si nos fijamos podemos ver como algunas de las rocas simulan figuras, como por ejemplo una parecía un león con la boca abierta.
Además de ver isla Grosa, también vi un pequeño islote que está cerca y que se llama isla del Farallón. Es habitual que esté lleno de lanchas con aficionados al submarinismo ya que el fondo marino es realmente maravilloso. En mi caso solamente pude disfrutar desde el barco del impresionante tono azul turquesa que tiene el agua cerca de las islas y que nos recuerda al mar de la zona del Caribe.
Una sorpresa añadida en mis excursiones a isla Grosa fue la posibilidad de ver saltando a los peces voladores mientras se alejaban del barco. No fue el único elemento extraordinario que hubo, también vi unos peces azulados y el capitán del barco echó pan a las gaviotas para que pudiésemos verlas de cerca. Es una sensación realmente impresionante el ver a decenas de gaviotas volar tan cerca de ti que parece que si estiras la mano las puedes tocar.
Una última cosa que me queda por decir sobre este sitio es que la excursión a esta isla se puede realizar tanto en familia como con amigos. En mi caso personal, una vez la hice acompañada por mi pareja y la otra vez fue en familia y puedo asegurar que no hay problema en llevar niños pequeños porque no corren peligro.
Da igual ver la isla tanto por la mañana como por la tarde, ya que es maravillosa en cualquier momento del día. No obstante, en cada momento tiene una ventaja diferente. Por la mañana se puede disfrutar de sus aguas de color turquesa, mientras que por la tarde debido a la luz anaranjada del sol da la impresión de ser un lugar mágico. Sea cuando sea, ¡no dudes en visitarla si tienes la oportunidad!
![](https://images.mnstatic.com/3b/1a/3b1ad9d59736123ae56fe6f5548c2ffc.jpg?quality=75&format=png&fit=crop&width=65&height=65&aspect_ratio=65%3A65)
![](https://images.mnstatic.com/00/97/00977454e51d36c7efbe5d1b0b017295.jpg?quality=75&format=png&fit=crop&width=65&height=65&aspect_ratio=65%3A65)
![](https://images.mnstatic.com/a5/cc/a5cc51bdf0e5b93e57bb729d67464404.jpg?quality=75&format=png&fit=crop&width=65&height=65&aspect_ratio=65%3A65)