Mi resumen es simple: tengo que volver.
Dicen que es el pub más alto de Irlanda.
Según por qué carreteras vayas llegaras atravesando unos paisajes impresionantes.
La comida bien, irlandesa y muy bien al igual que el servicio. Hay mucho sitio y es muy grande pero va mucha gente, se puede reservar. Nosotros sin reserva esperamos 30 minutos.
Y la decoración interior espectacular mires donde mires siempre veras algo nuevo y diferente.
Hay que ir.