La Huasteca

Macizos de formas caprichosas flanquean el cauce de un gigante que casi siempre está dormido. Hoy, después de meses de observar un acaudalado Río Santa Catarina, permanecen silentes, ofreciendo un paisaje precioso y permitiendonos escalarlos y admirarlos. Qué bonita es La Huasteca, aunque por lo general no corre agua por ella.

Es un lugar que frecuento mucho, pues se respira tranquilidad y armonía.

De día, espero la puesta de sol y los increíbles colores que trae con ella.

De noche, escapamos de la contaminación luminosa de la ciudad y es posible ver hasta la Vía Láctea.

Últimamente ha subido mucho la cantidad de visitantes en el parque, pero creo que esto es algo bueno, pues es un lugar que merece ser visto por todos.

Nido de los aguiluchos