La Torre de Urkulu

Los verdes pastizales de Urkulu, montaña fronteriza entre Navarra y Francia, separan la cuenca del río Irati del valle de La Nive. Allí, en lo más alto de esta cima despejada y abierta a todos los vientos, se observan unos enormes sillares calizos perfectamente ensamblados. Son la base de una fortificación de la época romana, que fue construida por orden de Julio César en el siglo I antes de Cristo para conmemorar la conquista de Aquitania. Mide 3,50 metros de alto, por 19,5 de diámetro.

Con posterioridad se utilizó como faro-guía de viajeros y peregrinos que atravesaban el Pirineo por este paso estratégico.