Platos riquísimos y el servicio de 10.
La decoración interior es realmente agradable, y fuera hay una terraza genial para tomar algo por la noche.
Un mousse de chocolate no te puede faltar para acabar a lo grande.
La decoración interior es realmente agradable, y fuera hay una terraza genial para tomar algo por la noche.
Un mousse de chocolate no te puede faltar para acabar a lo grande.
El que conozca esta cadena sabrá bien que va a encontrar calidad en la comida, buen servicio y un lugar muy chulo en el que poder comer o cenar.
Yo he estado un par de veces, una, tome solo una limonada, estaba buenísima, tengo que repetir. La otra cené y además, muy bien. Yo me tome un Salmón, que tenía un rebozado bastante peculiar, pero realmente bueno. Además, un ritos, creo que era de rabo de toro, que tildaría de especialidad.
Por cierto, tiene un terracota en la puerta en la que, los días de calor de Madrid, se tiene que cenar de muerte.
Está muy bien, la calidad típica de esta cadena de restaurante con una decoración agradable y ambiente tranquilo. Tiene terraza y en la planta -1 un salón privado para unas 18 personas.