Las Dunas de Maspalomas

Uno de los lugares más sorprendentes de Gran Canaria son las dunas de arena de Maspalomas, que te trasladan casi sin darte cuenta a un desierto que acaba en mar. Son una auténtica pasada y uno de esos espectáculos que uno no puede perderse. La mayoría de las dunas están protegidas y no se puede caminar sobre ellas, pero hay una zona (más cerca de las Meloneras) que si lo permite. Ideal para ver el atardecer y ver el paisaje cambiar de color. Es impresionante.

Una amiga visitó las Dunas de Maspalomas, una enorme extensión de arena ubicada al sur de Las Palmas de Gran Canaria. Me recomendó hospedarme en el lugar para disfrutar más de las mismas. Así lo hice, nos instalamos en un hotel en la zona de Playa del Inglés donde los precios de los hoteles son más accesibles que en la zona que rodea al Faro.

Una experiencia fantástica, caminar descalza sobre las dunas de arenas. Cada rincón que forman las dunas es ideal para practicar el nudismo, de echo en mi caminata me he encontrado con varios nudistas. Y lo más bello para mi, es caminar al amanecer, sentir la arena fresca bajo mis pies y contemplar el sol naciente, en una paz increíble.

Aunque las fotografías puestas no hacen justicia al lugar (es lo que tiene a veces escanear diapositivas...) Las Dunas de Maspalomas es uno de los sitios mágicos del Archipiélago Canario.

Las Dunas de Maspalomas junto con "El Charco" y "El Palmeral" forman parte del Delta de Maspalomas, que ya en el año 1987, fue declarado como paraje Natural de Interés Nacional y en la actualidad es Reserva Natural Especial.

El recorrido por las Dunas empieza en la Playa del Inglés, para ir adentrándose hasta la zona del Oeste y terminar en la Charca y el cauce del Barranco de Fataga.

Durante todo el recorrido podemos ver las formas cambiantes según el viento dominante, por lo que no hay ni un solo día que el paisaje sea el mismo.

La dunas de Maspalomas son uno de los lugares más atractivos de las Canarias. No solamente sirven de telón de fondo a una impresionante playa. Estas dunas por si solas son un lugar que ver en Gran Canaria.
El viendo las modela cada día y el sol las calienta tanto durante el día que es imposible caminar sobre su arena. Sin embargo, al caer la tarde, cuando se acerca la puesta de sol, la arena se refresca, se torna de un color anaranjado y caminar sobre las dunas es una placer. Sentir los pies hundirse en la arena mientras sientes la brisa del mar.

Para visitarlas tienes dos opciones:

1. Poner en tu gps el hotel Riu Maspalomas y aparcar por la zona. Hay un paseito que te lleva directamente a una zona con fácil acceso a las montañas de arena.

2. Caminando desde playa del Inglés. O bien desde la playa del faro de Maspalomas o bien desde la zona donde se encuentra el McDonalds. Yo personalmente recomiendo este paseo, la playa es muy, muy larga y cada 500 metros hay un chiringuito donde tomar algo.

Atrévete a subirte a una de las enormes montañas de arena, el paisaje parece de otro planeta.

Es bastante llamativo que exista la posibilidad que este sistema dunar fuera creado por el Tsunami que creo el maremoto de 1755 de Lisboa.
Merece las vistas el conocer este lugar, por un instante te sientes aislado de todo.

Las Dunas de Maspalomas se encuentran en el término municipal de San Bartolomé de Tirajana, al sur de la isla de Gran Canaria. Se trata de una reserva natural que incluye una zona de dunas y un humedal conocido como La Charca. Las dunas se encuentran detrás de las playas de El Inglés y la de Maspalomas. El mejor momento para visitarlas es al atardecer o al amanecer. Desgraciadamente esta reserva natural se encuentra amenazada por la gran cantidad de hoteles y atracciones turísticas que la rodean y que impiden su desarrollo.