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Les calanques forman uno de los...
Les calanques forman uno de los paisajes más espectaculares y bellos de la isla de Córcega. Se encuentran situadas en el golfo de Porto, muy cerquita de la localidad que lleva el mismo nombre, y consisten en unas fantasmagóricas formaciones rocosas que se alzan más de 400 metros sobre el nivel del mar, formando finas columnas, torres y cantos rodados de formas irregulares e impresionantes.
Se trata de un paisaje tan espectacular que se ha convertido en Patrimonio Mundial de la Humanidad. Aunque, hay una cosa que no entiendo, sólo está considerado patrimonio mundial una parte de la zona, mientras que otra, que es muy similar y posee unas formaciones rocosas casi iguales no está considerada como tal...
Este paisaje se ha ido creando muy poco a poco por el efecto de la erosión del viento y el mar.
Las Calanques pueden verse prefectamente recorriendo la carretera D81, aunque eso sí, hay que tener cuidado con esta carretera porque está repleta de curvas completamente cerradas y en algunos tramos es complicado que pasen dos coches al mismo tiempo. De todos modos, a lo largo de esta carretera se han creado numerosos puntos de estacionamiento para que los conductores puedan pararse a contemplar las colosales formaciones graníticas que poseen unos colores impresionantes que tiran a ocres, amarillos y rojizos.
De todos modos, la mejor opción para disfrutar completamente de este paisaje es realizar alguna de las muchísimas rutas que surjen en esta zona y que permiten contemplar las formaciones rocosas de cerca. Hay rutas para todo el mundo ya que poseen una duración muy variable y tienen también un grado de dificultad muy variable.
Lo que recomiendo a todo el mundo que se acerque a visitar esta zona es que aproveche para visitar después Porto, uno de los pueblos más bonito de todo Córcega que cuenta además con formaciones de este tipo por todos los alrededores. Porto es también un lugar perfecto para iniciar y finalizar las excursiones por las Calanques
Las Calanques pueden verse prefectamente recorriendo la carretera D81, aunque eso sí, hay que tener cuidado con esta carretera porque está repleta de curvas completamente cerradas y en algunos tramos es complicado que pasen dos coches al mismo tiempo. De todos modos, a lo largo de esta carretera se han creado numerosos puntos de estacionamiento para que los conductores puedan pararse a contemplar las colosales formaciones graníticas que poseen unos colores impresionantes que tiran a ocres, amarillos y rojizos.
De todos modos, la mejor opción para disfrutar completamente de este paisaje es realizar alguna de las muchísimas rutas que surjen en esta zona y que permiten contemplar las formaciones rocosas de cerca. Hay rutas para todo el mundo ya que poseen una duración muy variable y tienen también un grado de dificultad muy variable.
Lo que recomiendo a todo el mundo que se acerque a visitar esta zona es que aproveche para visitar después Porto, uno de los pueblos más bonito de todo Córcega que cuenta además con formaciones de este tipo por todos los alrededores. Porto es también un lugar perfecto para iniciar y finalizar las excursiones por las Calanques
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