Maid of the Mist

Este nombre tan romántico es el que se le da al barco que tomas para tener una visión más cercana y húmeda de las cataratas del Niágara en su parte canadiense. En horas punta puede haber cola de cientos de personas y demorarse bastante el viaje, porque sólo tienen dos barcos, y uno de ellos es bastante pequeño, por lo que recomiendo ir a primera o última hora, cuando los buses que vienen desde Toronto no han llegado o ya se han ido.

El recorrido dura una media hora, y te vas a mojar sí o sí, de hecho te dan unos chubasqueros en la entrada que puedes conservar a la salida, porque, según el viento, a veces viendo las cataratas desde arriba te mojas bastante.

En las Cataratas del Niagara tenemos la posibilidad de coger un barco y acercarnos al máximo a su base para poder verlas desde abajo.
A unos 100 metros de ellas, hay unas taquillas en las que podemo comprar el pasaje, bajaremos unas escaleras, nos colocaremos un chubasquero que nos dan y subiremos al barquito.
El viaje dura una media hora pero bien vale la pena, es una de esas cosas para turistas que hay que hacer, no te puedes ir sin subirte!!
Os recomiendo que vayáis con el primer barco, que si no recuerdo mál era a las 9.30 ya que después se llena de gente y tendréis que hacer muchísima

Y el paseo en barco.