Una joya arqueológica en el Metro
Si visitas la Ciudad de México y te manejas en Metro seguramente en alguna oportunidad pases por la Estación Pino Suárez, que pertenece a la línea rosa y te deja cerca del Zócalo capitalino. Además de ser una estación importante, por su ubicación, conectividad y cantidad de pasajeros que a diario la transitan, Pino Suárez esconde un tesoro arqueológico en sus pasillos. El descubrimiento vio la luz cuando se comenzó a construir esa línea del Metro en la década del 60.
En la actualidad se conserva sólo el centro adoratorio y la pirámide. Según los arqueólogos esta última estaba dedicada a Ehécatl-Quetzalcóatl, Dios del Viento, de allí su forma circular que podían resistirse al paso del viento y hacerlo circular sin inconvenientes.