Increíble paisaje.
Lo más recomendable es acudir en invierno, ya que con las lluvias se crea una imponente cascada de casi 300m. Yo la vez que estuve por allí, no pude verlo con agua, pero aún así quedé impresionado de la altura que tiene.
Estuvimos en el mirador de arriba. De vértigo. Al principio no nos atrevíamos a asomarnos porque el balconcillo sale de la pared, y puedes ver un barranco de infarto bajo tus pies.
Tendré que volver para ver si lo pillo alguna vez con agua y así poder disfrutarlo...
Una experiencia inolvidable.