Una ruta maravillosa, no os la perdáis!
Fuimos a pasar el fin de semana a La Guardia y nos informaron en el apartahotel que no dejáramos de visitar los Molinos de Folón y Picón. Se trata de un conjunto de 57 molinos restaurados en los años 90, que datan de los siglos XVIII y XIX.
Es una paseo muy agradable, con unas vistas panorámicas extraordinarias de esta Sierra del Rosal, famosa por sus vinos.
Merece la pena refrescarse en sus ríos y admirar la desembocadura del Miño, con el Monte Tecla presidiendo esta zona majestuosa.
Si haceis la ruta no olvidar acercaros a las pozas do Cal, donde os podréis dar un baño gratificante.