Nuestra amiga la
Mientras caminábamos sin rumbo por la ciudad de Dublín, en busca de un hot chocolate o algo calentito para beber, nos cruzamos con Molly, aquella mujer que vendía pescado a ritmo de "¡¡Mejilles y berberechos vivos!!"
Se trata de una estatua erguída en reconocimiento a una pescatera que, aunque no haya nada que demuestre que existió, el pueblo irlandés la tiene un especial cariño. Se dice que murió en la calle por una fiebre y que por las noches se prostituía.
Existen canciones que hablan de ella y que a día de hoy siguen sonando en vivo en los bares de la zona.
Os preguntaréis el por qué de mi título... Es curioso ver cómo todos l@s hispano-hablantes, pero sobre todo los hombres, se asombran a ver los pechos de la estatua!!! y mientras te estás tomando tu hot chocolate tranquilamente totalmente camuflada como una irlandesa más puedes escuchar: "Jooooooooofhgshjkfgskk con las tetas de la Molly!!!!" Es tan curioso como gracioso....