Monasterio de Suso

Name: Monasterio de Suso
Address: San Millán de la Cogolla, San Millán de la Cogolla, 26226
Telephone: +34 941 373 082
Rating: 5.0000

5/5 (15 valoraciones)

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San Millán de la Cogolla Dirección

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14 opiniones sobre Monasterio de Suso

Rodamons

Monasterio de Arriba

Monasterio de Suso quiere decir Monasterio de Arriba.
Se halla en San Millán de la Cogolla a unos 40 kilómetros de Logroño entre montes y bosques.
En este lugar los eremitas del Medievo se alojaban en las cuevas existentes en los montes y escribieron las primera palabras en castellano. Está considerado junto con el Monasterio de Yuso (Monasterio de Abajo), patrimonio de la humanidad.

Al Monasterio se accede a través del Monasterio de Yuso donde se adquiere el ticket, con un coste de 4 € incluye la visita al Monasterio de Suso y el traslado mediante un autobús. Detalle que hay que tener en cuenta si se va por primera vez.

Existe un buen aparcamiento en el Monasterio de Yuso.
La visita se realiza a ambos Monasterios, la distancia entre ellos es solo de unos 4 kilómetros .

Aunque la carretera es angosta y empinada es muy pintoresca puesto que transcurre transcurre entre bosques y tiene como telón de fondo las cumbres nevadas del monte San Lorenzo (2.272 m.s.n.m) .

Al bajar del autobús y a pie de Monasterio seréis recibidos por el guía Sr. Pepe Gómez quien os hará una interesante visita guiada.

El Monasterio fue fundado por San Millán, Siglo XI. Tiene elementos visigóticos, mozárabes y románicos. Destaca la cueva oratoria de San Millán. En una de las oquedades existe un altar, se dice de él que es el más antiguo de España.

El Cenotafio construido en el Siglo XII es una figura yacente de San Millán y está construido en alabastro oscuro, es el lugar donde murió el Santo, aunque sus restos reposan en el Monasterio de Yuso.

Alberto Sifuentes Giraldo

Siglos de historia y espiritualidad concentrados.

Excelente

Los Monasterios de San Millán de la Cogolla (localidad en la residió entre los siglos V y VI este Santo anacoreta, que fue el primer patrón del Reino de Castilla) tuvieron gran importancia en el desarrollo del idioma castellano y están actualmente incluidos en la lista de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Aemilianus (Millán), natural de Vergegium (actualmente Berceo), fue un pastor que a los 20 años sintió la llamada de Cristo y adoptó la vida de ermitaño, siendo su maestro espiritual San Felices, que residía en la vecina localidad de Haro. Con este fin, edificó una pequeña celda rupestre aprovechando las oquedades del terreno, en la cual residió hasta los 101 años, y en torno a ella se organizó una comunidad monacal mixta que mantuvo viva su memoria, lo que hizo de este lugar un centro de peregrinación para reyes y condes cristianos, que encomendaban el éxito de sus campañas contra el Al-Andalus a este Santo.

El edificio actual del Monasterio de Suso (del latín 'sursum' = arriba), pequeño en dimensiones respecto a la extensión que debió haber tenido en sus momentos de mayor esplendor, se ubica en lo alto de la ladera de una colina, en medio de una vegetación exhuberante. Es un lugar cargado de historia, en el cual podemos encontrar la antigua cueva sepulcral del siglo VI en la que se conserva el cenotafio del Santo (sus reliquias descansan en el Monasterio de Yuso), restos del antiguo eremitorio visigodo, así como arcos mozárabes y románicos. Se encuentran aquí, además, los sepulcros de los 7 Infantes de Lara y su ayo, cuya leyenda probablemente fue parte de un cantar de gesta ya perdido.

Es un lujo poder visitar un lugar con tantos siglos de espiritualidad y cuya conservación ha requerido un esfuerzo considerable. Tras su declaración como Patrimonio de la Humanidad en 1997, debió permanecer cerrado durante 3 años porque la fragilidad del terreno donde fue construido lo ponía en riesgo de desplazarse, esto aunado a un volumen de turistas para el cual no estaba diseñado. En la actualidad se encuentra consolidado por barras de concreto verticales que se han inyectado en la muro de la ladera donde fue excavado y barras horizontales en su base, además de haberse limitado el volumen de visitantes a un máximo 25 cada 30 minutos. Esperemos que este increíble lugar perdure para las próximas generaciones.

Juan PÉREZ Sanchez

Me gustó mucho el misticismo

Excelente

En una visita guiada se te explica un poco cada parte del monasterio. Me gustó que ahí se hicieron las primeras glosas del idioma castellano y que fue donde está originalmente la tumba de San Millán.

También me llamó mucho la atención un trozo de madera que estaba dentro de unas rejas y que posteriormente la guía nos dijo que era de un milagro de San Millán donde un árbol ya cortado había crecido.