Kris por el mundo
Hotel Boutique
A pocos metros de la Puerta del Alba y de la entrada al casco antiguo de Vilnius se encuentra este pequeño y coqueto hotel con un puñado de habitaciones cálidas y decoradas con encanto. La nuestra fue la 304 y daba a la calle principal y contaba con una gran cama bastante cómoda, aunque las almohadas eran demasiado gruesas para mi gusto. El baño tiene gel, champú y crema del cuerpo, así como seca toallas y secador del pelo. También hay caja fuerte, albornoces, TV (sin canales en castellano) y caja fuerte.
El desayuno se incluye en el precio y se toma en el sótano del edificio. Es sencillo y no cuenta con algo tan básico como una tostador.
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