Museo Solomon R. Guggenheim

El Guggenheim Museum es uno de los museos de arte moderno más famosos del mundo, por sus colecciones, pero también por este edificio redondo, a la par de Central Park en Nueva York. Ahora lo están restaurante pero aún se puede visitar, entonces no te lo pierdas durante tu visita en Manhattan.

La entrada vale 18 dólares, pero hay una oferta que se llama el City pass y te permite aprovechar 6 museos y atracciones, como subir al Empire State o el Museo de Arte Moderno, y vale 65 dólares. Si quieres verlo todo en la ciudad, puede ser una opción interesante. Pero yo no tuve tiempo de ir a todas y al final no ahorré nada.

Antes de ir mirad la exposición general a que está dedicada, sino os podéis llevar una gran decepción. Si sólo queréis admirar la estructura del edificio, que sí vale la pena, podréis entrar al vestíbulo y admirarlo desde abajo completamente gratis, en la zona donde se compran las entradas. La primera vez que fui había una exposición dedicada al blanco y negro, completamente decepcionante.

Desde siempre ha sido una constante, una necesidad, una forma excéntrica de demostrar lo que vale una civilización. Grecia, Roma y Egipto, pasando por Londres y París, el poder económico y político de las naciones y de sus grandes capitales han sentido ese apetito por las obras de arte más representativas de la historia de la humanidad, por tenerlas, exhibirlas y alardear de ellas.
Y como no, Nueva York, la gran metrópolis del mundo, la ciudad que es símbolo del poderío de los Estados Unidos no podía, ni quería resistirse a tan poderosa tendencia y mucho menos aún cuando se elevó como salvadora del mundo tras la II Guerra Mundial. Era el momento de los grandes magnates mecenas del arte que fueron más recientemente sustituidos por los emporios comerciales y financieros. Ellos se han encargado de mantener viva la llama del impulso de creación que traen a la ciudad todos los que buscan una manera de expresar lo que llevan en el alma, de compartirlo con el resto de ciudadanos del mundo que tarde o temprano tendrán que pasar por la Gran Manzana.