Un pueblo apasionado
Oberammergau fué todo un descubrimiento ya que íbamos camino de Garmisch-Partenkirchen donde teníamos el hotel. Fué una sorpresa muy agradable por la espectacular decoración en las fachadas de las viviendas, sus arreglos florales y sus artesanos de la madera. Si viajais por esta zona haciendo "la ruta romántica" no dejeis de visitarlo.