Palacio arzobispal de Madrid

Muy cerca de la plaza de la Puerta Cerrada y la plaza Mayor, metros Sol, Tirso de Molina o La Latina. Si estás visitando esta zona vale la pena que te acerques a ver al menos la basílica de San Miguel, que forma parte de este palacio.

La construcción es del siglo XVIII, y tiene fachadas que dan a varias calles, como las de San Justo, Puñonrostro, la plaza del Conde de Barajas, calle de la Pasa y el pasadizo del Panecillo. El edificio principal, que es la residencia del arzobispo y de los cardenales de la archidiócesis de Madrid, es de trazado sencillo y sin adornos. La parte de mayor valor artístico es la Basílica Pontificia de San Miguel, que es una iglesia típica del barroco madrileño.