Precioso
Es de los antiguos, no modernizado quiero decir, pero cuanto encanto tiene!!!
Lo abrieron unos días antes tras el invierno, su ubicación es excepcional, de el mismo sale la bonita excursión a los llanos de La Larri.
Por la noche oyes a los animales merodear por el edificio, y parece que puedes tocar las cumbres nevadas desde la ventana.
Una belleza y un remanso de tranquilidad, ya estoy pensando en volver.