Parque Nacional de Cinque Terre

El Parque Nacional de las Cinque Terre, con sus 4.300 hectáreas, es el parque nacional más pequeño de Italia y, a la vez, el más densamente poblado, con 5.000 habitantes divididos en cinco núcleos habitados: Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monterosso al Mare.

Desde hace siglos el hombre ha modificado este entorno natural para obtener franjas de tierra cultivable - los llamados "ciàn" - soportadas por más de sietemil kilómetres de muros de piedra seca (casi la longitud de la Gran Muralla china!). Así pues, lo que hace realmente especial este territorio con respecto a otros es que aquí el entorno natural ha sido profundamente modificado por la acción del hombre.

El Parque Nacional Cinque Terre lo forman cinco pueblos costeros, muy coquetos, que se pueden visitar en un sólo día porque se vende la Tarjeta Cinque Terre que cuesta 13 euros y te permite ir de pueblo en pueblo en tren ilimitadamente durante el día. Los trenes son los normales de Trenitalia.

Yo la compré en la propia estación de La Spezia,en una especie de agencia que hay en el andén.Los trenes circulan cada media hora.Los pueblos están a muy poca distancia uno de otro.El precio incluye wifi gratis en las oficinas de información de cada pueblo y en Corniglia,que está en una ladera, transporte desde la estación al pueblo.La gente habla maravillas de este parque nacional.A mí,sinceramente,me pareció una experiencia atractiva pero no le encontré a estos pueblos más encanto.

Me hablaron tanto de estos pueblos que decidí ir a conocerlos. Hicimos base en La Spezia, que es una ciudad mas grande y además mas barata. Desde allí salimos a recorrer estos bellos lugares. El tiempo no estuvo bueno a fines de agosto, así que no pudimos hacer el recorrido en barco desde donde se aprecia mejor estos pueblos enclavados en la montaña. Sin embargo la experiencia en tren fue muy buena. Los trenes iban abarrotados de gente ávida de conocer. Subir y bajar en cada pueblo, una aventura maravillosa que vale la pena experimentar. Los caminos que unen los distintos pueblos estaban cerrados por el mal tiempo, así que no se podía hacer senderismo.