Un buen hotel en Berlín
Una de las mejores cosas de este hotel es su situación, ya que esté justo en la plaza Alexanderplatz, en pleno centro del Berlín oriental.
Está justo al lado de la torre de TV, y el edificio donde está albergado es un edificio emblemático de Berlín.
Justo al lado se encuentran las Galerías Kaukof, que es una cadena muy famosa de grandes almacenes en ALemania.
A 5 minutos andando está la Isla de los Museos y la Catedral de Berlín, por lo que se puede ir andando a una de las zonas más importantes de la ciudad.
Yendo a la Isla de los Museos se puede acceder también al barrio judío,un barrio que realmente merece la pena visitar.
A pocos minutos también, pero yendo a mano izquierda desde el hotel, está el Barrio Nikolai, donde surgió Berlín, y donde se puede ver el ayuntamiento del Berlín Oriental.
El hote cuenta con 37 plantas; 36 dedicadas a habitaciones, 1 a comedor, y en la planta 37 está el Casino de Berlín.
La recepción es grande, moderna, y cuenta con un bar.
Hay 8 ascensores, dividos en 2 grupos de 4.
4 de ellos suben de la recepción a las planta 21. Y los otros 4 sólo suben de la 22 al final, es decir, de la recpeción te llevan directamente a la planta 22.
LAs habitaciones son modernas, y lo más coqueto del hotel es la ducha, integrada completamente en la habitación. No hay cuarto de baño propiamente dicho, sino que hay una puerta que es lo que es el water, otra de cristal que es una ducha toda en mármol, y luego hay un lavabo con un espejo y con cristales por donde se ve el interior de la ducha.
El hotel está muy bien, pero claro, de intimidad en el baño nada de nada.
Luego tiene una mesa de despacho moderna con acceso a internet, y un armario doble con mueble bar.
Las vistas desde el hotel son espectaculares, ya que se ve todo Berlín.
Nosotros en concreto estábamos en la planta 23, y las vistas nos daban a Berlín oriental.
El comedor, situado en la planta primera es enorme, con mesas pequeñas.
Recomiendo este hotel. Si vuelvo a Berlín procuraría ir al mismo.
Nota: Opinión publicada en ciao por mi mujer, poyui