para desconectarse de la agitada ciudad
Como un oasis en medio del desierto, así fue mi experiencia al recorrer este parque de la ciudad de Bogotá. Al ingresar te olvidas del pito de los autos, de las preocupaciones, incluso por un momento de que estás en una ciudad (aunque algunos aviones que pasan por allí te lo recordarán jeje..)
Cuenta con dos lagos pequeños que son el centro del parque, todo lo demás son áreas verdes para el disfrute del cuerpo y de la vista.
Hay un área con juegos para niños, así como un pequeño tren cuyos vagones sirven de tiendita para comprar snacks y bebidas. Y los principales protagonistas son los patos, ganzos, y demás animales que hacen del parque su hogar.