Parque Nacional Los Glaciares

Es difícil la descripción de estar en estos confines de la tierra, a la vez de muy hermoso. Dada la proximidad tan gélida del manto de hielo más grande del planeta. Tan blanquecino en las cumbres nevadas de las cimas, como las azuladas de sus ventisqueros.
Tras partir de Punta Bandera, navegamos para visitar uno de los brazos, el norte del lago Argentino.

Iniciamos un sendero de bosque virgen, en el que predominaban los ñires y lengas, arboles aclimatados a estos parajes australes, tan húmedos.
Paisajes donde se rodaron películas de Disney de camino a la Laguna Onellí, cuya laguna rodeada de montañas y picos nevados , es alucinante.

Creo que se habrán dado cuenta del hechizo que provoca en mí visitar la Patagonia, en especial este Parque Nacional, creado en el año 1937 y Patrimonio Mundial de la UNECO desde 1981, por la cantidad de rincones que he venido subiendo año tras año. Podría decir sin temor a equivocarme demasiado, que como reino de los hielos continentales y glaciares, con zonas casi inhabitadas, con sus muestras de restos prehistóricos, pinturas rupestres, fósiles humanos, animales y vegetales, de la multiplicidad de sus emocionantes paisajes, áridos, helados o semiáridos dependiendo de la época del año y las temperaturas.