Cristina E Lozano
Una vereda junto al Mekong
Llamamos ‘paseo de Chiang Sean’ al camino que discurre junto al Mekong y que lleva desde el puerto grande de la ciudad (el de los cargueros chinos) hasta bastante más allá de su embarcadero. Se trata de una agradable y bien pavimentada vereda salpicada de árboles, bancos y agradables terracitas para sentarse a descansar.
En su parte central, donde viene a morir la calle principal (la del mercado de Chiang Saen), un gran cartelón da la bienvenida al visitante. Tras él hondean las banderas nacional y locales; tras él puede accederse al coqueto embarcadero que desemboca en el octavo río más grande del mundo. Verás que hay una especie de tejadillo con bancos. Si llueve puedes refugiarte ahí y disfrutar de la vista sin mojarte.
Mola del paseo de Chiang Saen la enorme plaza donde se encuentra la comisaría (si te pones de frente a la calle principal, con el Mekong a la espalda, es la que queda a la derecha). Al caer la tarde se llena de deportistas. Hay un mini gimnasio al aire libre, se marcan pistas de badminton con cinta adhesiva, y se dan clases de thai chi o aeróbic.
Por las noches, parte de las aceras del paseo de Chians Saen (pasando un poco la plaza) se llenan de restaurantes. Si es sábado por la noche, justo al lado se coloca el Walking Saturday Market.
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