Las cuevas de la muerte
Visitar la colina de Phnom Sampeau supone, una vez más, enfrentarse al episodio más duro y macabro de la historia reciente de Camboya. Y es que esta colina fue uno de los muchos lugares elegidos por los hombres de Pol Pot para asesinar a sus víctimas, torturándolas en sus muchas cuevas y arrojándolas colina abajo, muriendo así despeñadas tras padecer largos sufrimientos.
Una vez muertos, los cuerpos eran amontonados en las cuevas, en las cuales se han encontrados centenares de huesos. Actualmente estas cavidades pueden visitarse como parte de la ascensión hasta la cima de la colina, en cuyo punto más alto se encuentra un monasterio con una estupa dorada.
Las vistas desde lo alto son sencillamente espectaculares, por eso no es de extrañar que éste fuese también un lugar estratégico en tiempos de guerra, de la que varias armas del ejército japonés pueden dar testigo. En el recorrido nos encontraremos asimismo con varias cuevas-capillas y estatuas de diferentes divinidades, entre las que destaca un gigantesco Buda dorado.
Phnom Sampeau se encuentra a 18 kilómetros de la ciudad de Battambang. La forma más sencilla de llegar hasta allí es hacerlo en un tuk-tuk, como parte de un recorrido turístico que puede incluir otros lugares de interés, tales como los templos de Wat Banan y Barseat.
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