Nada más entrar a las ruinas de Uxmal ...
Nada más entrar a las ruinas de Uxmal se aparece majestuosamente la pirámide del adivino, igual de magnífica que el castillo de Chichén, no obstante esta es más densa y abombada, no es escalonada y recuerda a una antigua pirámide egipcia. Los escalones son mucho más estrechos y la subida más empinada, aquí da verdadera sensación de que si no pones bien los pies te vas abajo, por tanto la escalada es lenta y con la atención bien puesta en el ascenso. No apto para los que padecen vértigo. Ah¡ pero la vista es como siempre sensacional, todas las ruinas envueltas por la densa selva que se hunde en el horizonte. Un buen cigarrillo acompaña estos grandes momentos.