Roberto Gonzalez
Playa de Belle Mare
Fue la primera playa que pisé en Isla Mauricio, y por eso, y por su belleza, es una de mis favoritas.
Al principio me resultó un poco chocante el concepto de playa de la Isla, quizá porque la idea de playa paradisiaca en nuestra mente es con cocoteros, hamacas colgando, chiringuitos de playa...
Aquí todo es distinto, pero no peor.
En principio todo el verdor que precede a la playa, y en la que pueden aparcar los coches, es un tipo de pino que es muy resistente al salitre del mar, que da mucha sombra, aprovechada por la gente que va a pasar el día a la playa con su familia y deliciosas comidas criollas e hindúes.
La arena de la playa es de un blanco cegador, ya que es 100% coral reducido a polvo pero esto mismo hay que tenerlo en cuenta en algunas playas y bañarse con sandalias, ya que en el agua quedan restos de coral que pueden producirnos pequeños cortes si no caminamos con mucho cuidado.
El agua, por supuesto, muy limpia y clara, y como podeis imaginar hay que caminar mucho para que nos cubra tan solo un metro.
La playa es preciosa y en los alrededores se abre el pueblo, con una tienda-manufactura de Boss y otra de Quicksilver- Roxy, con precios de al menos un 50% menos de lo que pagaríamos en Europa.
En el pueblo probamos nuestras primeras samosas, unos triángulos de pasta tipicos de India, rellenos de verdura y pollo con mucho picante!!!
El agua, por supuesto, muy limpia y clara, y como podeis imaginar hay que caminar mucho para que nos cubra tan solo un metro.
La playa es preciosa y en los alrededores se abre el pueblo, con una tienda-manufactura de Boss y otra de Quicksilver- Roxy, con precios de al menos un 50% menos de lo que pagaríamos en Europa.
En el pueblo probamos nuestras primeras samosas, unos triángulos de pasta tipicos de India, rellenos de verdura y pollo con mucho picante!!!
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