jessiedani
Aún quedan lugares por descubrir
Caminando entre dunas y matojos, te separan de una vista insólita. Una playa kilométrica donde no hay nadie.
Te invade una sensación de conquistador afortunado y de alegría conmovedora. Lugar ideal para disfrutar de la soledad, de la brisa del mar, para pasear, para tomar el sol, para darte un chapuzón, para saltar y correr...
Es sin duda mi lugar preferido de Gambia.
Cerca de allí a tan solo unos pocos kilómetros se encuentra el Lemonfish, un gallery-lodge, donde podéis comer algo e incluso dormir.