Playa Quemada, Lanzarote
Conduciendo desde Puerto del Carmen en pocos minutos te vas adentrando en un mundo que siendo parte del nuestro parece de otro. La tierra se vuelve más negra, la vegetación escasea y no es posible ver una sola construcción que no sea natural.
A medida que avanzas por una pequeña carretera y desciendes una gran cuesta se vislumbra un pequeño pueblo de pescadores y una fina pero larga costa: Playa Quemada.
Unas pocas casas con lugareños arreglando sus redes, algún perro y un par de ingleses en busca de tranquilidad es lo que te puedes encontrar. Posee una playa de cantos rodados y arena negra, muy negra en donde puedes dejar tu toalla, tumbarte y descansar plácidamente, siempre después de un buen chapuzón en aguas totalmente cristalinas, no sin unas gafas de bucear porque la fauna es espectacular con miles de peces de colores.