Barrio de Pontocho

Pontocho es un barrio de los más famosos y tradicionales de Kyoto. Junto con el popular barrio de Gion, son los más conocidos de la antigua capital nipona por su relación con el mundo de las Geishas y las Maiko, llamado mundo de la flor y el sauce. Estos barrios, que yo ya tengo el privilegio de conocer con profundidad, siguen manteniendo su magia a pesar de que estemos en el siglo XXI, y muchas veces nos podemos llevar gratas sorpresas cuando paseamos por ello (prueba de ello tenéis en el vídeo que adjunto).

Ubicado en pleno centro histórico de Kyoto, Pontochō es junto con Gion uno de los barrios de referencia en cuanto al mundo de las geishas y maikos.

Lo más recomendado es visitarlo antes del anochecer para así disfrutar del cambio que sufre este pequeño barrio/calle y cómo ya en la noche contagia con su magia. Desde la estación de Tokyo suelen partir varios buses que os dejarán a escasos pasos de Pontochō.

Tras bajarse del bus y callejear un par de calles, no nos hará falta preguntar dónde está esta mágica calle ya que en sus entradas nos recibirán sus mágicos farolillos. Se trata

Pontocho es uno de los cinco hanamachi de Kioto, o lo que es lo mismo, uno de los barrios de geishas de la ciudad.

Si bien por el día sencillamente éstas se cruzarán con el viandante sin maquillar y vestidas con sencillos kimonos, por la noche el barrio se convierte en su reino y acuden a sus citas a los distintos restaurantes o abandonan su okiya rumbo a alguna fiesta en otro rincón de la ciudad.

En este barrio, igual que en Gion, encontrarse con alguna geisha es cuestión de suerte y acertar con la hora para coincidir con ellas cuando comienzan a acudir a sus compromisos.

Nosotros no tuvimos la suerte de ver a ninguna de ellas, y ni tan siquiera no animamos a cenar en alguno de los muchos restaurantes que se suceden uno tras otros. Muchos de ellos incluso ofrecen cuando el tiempo acompaña terrazas sobre el río Kamo.

El distrito de Pontocho está situado en la orilla oeste del río Kamo. Durante el día no resulta un lugar especialmente interesante.

Pero sí lo es al atardecer cuando sus calles se iluminan con los típicos farolillos de papel. Aquí encontraréis restaurantes para todo tipo de bolsillos, bares modernos y clubs de difícil acceso. Unos y otros se intercalan lo largo de las callejuelas iluminadas del barrio.

Pontocho es una buena opción para acabar el día dando un paseo, curioseando tras las puertas correderas y terminar con una cena tradicional al estilo Kioto.

Aunque muy caluroso, el verano con sus Matsuris es la mejor epoca para ver todo el colorido y las tradiciones japonesas...

Igual que el paseo por la ribera del río, os lo recomiendo al caer la noche. Para cenar, nuestro descubrimiento fue un pequeño bar de madera con las típicas cortinas y faroles, no en la acera que da al río, en la otra. Junto al menú en japo tenéis un pequeño menú en inglés, básicamente tienen "hot pot" o "pot pot" y dumplings/gyozas. Los pot pot son sopa con lima japonesa, verduras frescas variadas y cerdo, se ponen un par de minutos en el caldo burbujeante y... ¡A flipar! Para acabarte el caldo, pide noodles. Dos personas cenamos por 4000Y, muy económico.