Puente Khaju

El Puente Si-o-se Pol (en Persa سی وسه پل,) es el Puente de los 33 Arcos. Es el puente más largo de los once que existen en Esfahan, Irán.
Fue construido en 1602 por Shah Abbas I. Como su nombre indica es un puente de 33 arcos y a sus pies fluye en el río Zayandeh que nace en las montañas Zagros. Fluye atravesando el país de este a oeste regando el corazón, Esfahan y acaba yaciendo en el desierto Kavir (en el desierto Grande).
En la entrada izquierda del puente, hay unas escaleras que bajan hacía una tetería a orillas del río, donde los iraníes disfrutan de té con pastas y largas conversaciones.

Otro puente que esta en Isfhán, construido sobre otro puente por el rey persa Shad Abbas II por el año 1650. Sobre el río Zayandeh conecta ambas orillas la de Khaju y Zoroastrían.
Bajo los arcos, las compuertas regulan el flujo de agua. Ademas de ser un lugar de reunir a parte de una gran población que disfruta del lugar, entorno a los jardines.
Parte de la estructura esta decorado con azulejos y pinturas, lo mismo que la casa de té. En el centro del puente, se haya el pabellón donde "Shah Abbas" se sentaba admirando las vistas.
Un puente de 126 mt de largo con 24 arcos, hecho de ladrillo y piedra. Conocido también por "Baba Roknoddin" de dos pisos, uno de los más hermosos que combina además de la ubicación la belleza y la utilización que se le dio y se le sigue dando, la del relax.

Rara vez un puente puede ser sinónimo de buena vida. Fue construido alrededor de 1650 y tiene dos niveles (uno que sirve de cerradura y otro para cruzar la carretera). En el centro,hay una casa que fue transformada en teteria. La experiencia más fascinante fue ver el amanecer en verano. Los iraníes venían a dormir y a disfrutar de la frescura de la piedra, mientras que otros bebían té contemplando el amanecer. Desde arriba, también se pueden observar las familias que se asentaron en sus esteras, y las mujeres que discutían a la orilla del río ... Por no hablar de perfecta arquitectura y de los

Se trata de la parte inferior de uno de los puentes de la ciudad de Isfahan en Irán. Son varios los puentes, pero tres de ellos son espectaculares. Además, cuentan con mogollón de vida en su interior.

Normalmente no lleva agua.