Puerto de Llanes

La villa de Llanes siempre ha estado unida a lo largo de la historia a su actividad marinera. Se tiene conocimiento que desde los siglos XV al XVIII se practicaba la pesca de altura y bajura, también se comercilizaba la sal y existían caladeros de pescado donde se podían encontrar diferentes especies como: Sardina, merluza, congrio, ballena, besugo o caballa.

Después a finales del siglo XIX se convirtió en un reconocido puerto comercial, pero ya hasta el año 1900 no se creó un espigón en línea recta y ya finalmente en el año 1991 que se crearon 2 escolleras de bloques de hormigón en el espigón . Hasta la última reforma del Llanes marinero cuando se añadieron a ese espigón Los Cubos de la Memoria.

Un puerto muy bonito y especial, bastante diferente a los que ya había puesto, pues se trataba de una plataforma, que va al agua media flotando y se coge a unos palos anclados al agua, y corre con una guía por ahí...
Cuando sube la marea, sube la plataforma, la escalera, los barcos...cuando baja, baja todo...
Un gran invento, ademas de eso, es un puerto precioso, colorido, rodeado de barcos de colores, de casas señoriales....
Es perfecto, me encanta!!!

Puerto de Llanes

Llanes, y el concejo del mismo nombre, se sitúa en la parte oriental del Principado de Asturias. Una población entre la cordillera de los Picos de Europa, y el bravo Mar Cantábrico.

Precisamente el Puerto de Llanes es una de las zonas más visitadas y frecuentadas de Llanes. Se puede llegar cruzando la ciudad, o por el Paseo de San Pedro, que bordea los acantilados de esta villa marinera.

Hacía la bocana del puerto, se tiene una buena vista del Faro de Llanes, hoy en día sin uso. Frente al faro, la obra conocida como “Los Cubos de la Memoria”. 

Son las 7 y media de la mañana. Estoy haciendo tiempo con mis compañeros para emprender de nuevo el Camino de Santiago, concretamente el Camino del Norte, que llega a su destino recorriendo la costa norte de la Península. Entre ajetreo y caminata el puerto parece un oasis. Apenas habiéndose asomado el Sol por el horizonte, contemplas el contraluz de la mañana y escuchas a las primeras gaviotas emprendiendo el vuelo. El agua está tranquila, y una sensación de plenitud te invade. No necesitas nada más. No hace falta volver al mundo real.

Este es mi lugar ideal para vivir el verano, soy de México, pero desde que conocí Asturias y particularmente Llanes he decidido que no descansaré hasta tener una casa aquí para pasar mis veranos al lado de las experiencias que me quieran acompañar.

Llanes me alegra, me da una sensación de relajación que no encuentro en otro sitio, agudiza mis sentidos, satisface mi paladar; Llanes me llena.

Inserto en el lugar rodeado de bares y hoteles con senderos preparados para realizar caminatas inolvidables

Comienza cerca del puente que une ambos lados del pueblo y ofrece un precioso paseo viendo los barcos de pescadores llegar y terminando en los cubos de la memoria.

Las primeras lanchas se van incorporando al nuevo puerto, va tomando forma y aspecto, todavía a la espera de mayor ocupación y de incorporaciones de lanchas mas grandes y vistosas, supongo que según se acerque el verano la vida irá invadiendo las plataformas ahora casi desiertas

El puerto de Llanes es bastante elegante con las piedras pintadas y sus barquitos.

Tranquilo pueblo asturiano con un paseo precioso para disfrutar del mar Cantábrico.

Pero con encanto de esta ciudad asturiana cuya visita se hace imprescindible.

El color los reflejos y la belleza del entorno conforman una maravilla para los sentidos