Washington desde el Lincoln Memorial en la hora azul
Washington DC es una ciudad construida para impresionar al visitante. La capital de una potencia que aspiraba a ser mundial tenía que dejar con la boca abierta a todo aquel que la visitara, y así se lo planteó Thomas Jefferson al ingeniero y urbanista francés Pierre L´Enfant en 1790. Y fue George Washington quien eligió el emplazamiento definitivo al lado del río Potomac.
Planificada desde sus cimientos, Washington DC debía contar con amplias avenidas, grandes rotondas, monumentos y memoriales, además de los edificios oficiales del gobierno de los USA.
Desde entonces la capital no ha parado de crecer y de embellecerse con nuevos monumentos que siguen llenando de asombro a los visitantes y de orgullo patrio a los norteamericanos.