En un abrir y cerrar de ojos se llenó
Por este rincón hay que pasarse. Lo descubrí paseando por Toulouse (Francia). Antes de abrir sus puertas ya había gente haciendo fila para entrar. Me llamó la atención y decidí unirme. Miré antes la oferta de su carta y me convenció. Es un restaurante que ofrece un plato único: el entrecôte con su salsa típica y secreta, acompañado de patatas paja fritas. De entrante una ensalada de lechuga con nueces, pan y agua. El precio 16,50 €. Los postres van aparte y tienen un precio entre 5 € y 5,50 € pudiendo elegir entre 18 diferentes a cual más bueno. Tomé una copa de vino tinto Le Bordeaux Rouge de L'Entrecôte AOC (3,50 €) para acompañar a la carne.
El restaurante tiene dos pisos. En la planta calle hay tres salas grandes que se comunican entre sí y hay otras en el primer piso; los techos y las paredes visten a la escocesa. También cuentan con dos terracitas en la calle. La comida es buena y presumen de cocinar de modo natural.
De postre pedí quesos, me trajeron una tabla con diferentes clases y me pusieron un trozo de cada uno. Cené muy a gusto y pasé un rato agradable en este ambiente que pese al trasiego era relajado y animado.
Al salir de él seguía habiendo cola para entrar. También me gustó la ambientación musical en los aseos. Si os acercáis y recordáis esta recomendación seguro que os entra la risa... Muuu... Muuu... Muuu... ¡escucharéis!
Hay otros restaurantes de la misma cadena en Bordeaux, Nantes, Montpellier y Lyon.
Bon appetit a todos, os gustará.


