Restaurante Atschel

Aprovechando que nos alojábamos en el barrio antiguo de la ciudad, decidimos echar un ojo a ver si encontrábamos un buen sitio donde cenar (¡ya que en el mapa en barrio Sachsenhausen sale indicado con una rosquilla y una jarra!). Sin duda, la mejor gastronomía de la ciudad está aquí.
Así que después de pegar una vuelta vimos un "buen candidato". Un bar con terraza en una especie de garaje, lleno de gente y que parecía prometer... ¡vamos adentro!
Nos encontramos con mucha gente, cenando allí o dejando la sidra correr ;) El camarero muy simpático y la verdad es que en el restaurante se respiraba buen ambiente.

La cocina alemana es una gran desconocida de la que solo conocemos el codillo, las bratwurst o el chucrut, pero en este buen restaurante podremos degustar cualquiera de las otras variedades alemanas de una cocina un poco pesada pero muy interesante. Su plato de espalda al horno, es simplemente delicioso. La sidra no es la asturiana, pero acompaña muy bien este asado, aunque hay que ponerle un poco de agua para quitarle amargor a esta sidra. Los snitzchel retan a los mayores comilones.
Si puedes pide sitio en su terraza... ojo no aceptan reservas mas allá de las 8 de la tarde.