Fuimos a comer a la Brasería La Cabaña a...
Fuimos a comer a la Brasería La Cabaña a tiro fijo, pues había leído una buena crítica de este restaurante. Se encuentra frente al Mercado de Abastos, en una calle paralela a la Calle Mayor de Reinosa. El local no es muy grande (aunque había unas escaleras que subían a la planta de arriba, no sé si tendrán allí otro comedor): A la entrada hay una pequeña zona de bar, desde donde se accede, por una puerta situada al fondo a la izquierda al comedor. Es una casona antigua, y la decoración interior deja ver sus gruesos muros de piedra vista, que se combinan con la pintura al estuco en tonos azules y rojos para darle un aspecto más moderno. Las mesas son pequeñas (máximo 4 personas), de madera con salvamanteles individuales, y en lugar de sillas, hay bancos para sentarse (estilo vagón de tren). Me pareció decorado con bastante buen gusto.