César
Vamos habitualmente
Hace tiempo dejé de comer comida china. Por varios motivos, tantos higiénicos como por calidad y gusto, pues cada vez me gustaban menos.
Hasta que me aconsejaron este restaurante chino. Tardamos en dar con él, pues está justo al lado de un japonés y uno de esos tipo wok que tanto proliferan (y que tan mala es la comida). Pero cuando lo conocimos entendimos el por qué. Es simple: comida china (occidentalizada) pero recién hecha y cocinada con cariño.
Si os gusta la comida china y apreciáis algo bien hecho id a este restaurante. Nosotros vamos una o dos veces al mes y mira que nos pilla lejos.
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