AlexSandro
Este restaurante de Selçuk es muy particular, primero por como se presenta.
En su entrada expone una serie de atractivas vasijas de barro que permiten pensar que aquí los trabajadores se ocupan más de vender estos objetos que de cocinar. Pero una vez que se sienta en la mesa también es fácil pensar de nuevo en las excelentes habilidades del chef, que además también ha construido manualmente todas las mesas de la sala al aire libre.
El restaurante ha abierto recientemente, pero tiene buenas perspectivas de crecimiento si se piensa que está a sólo unos pocos kilómetros de Éfeso, un lugar bastante turístico, sobre todo el verano.
Entre los platos más ricos, hay un pastel de verduras y sopa de tomate, que se lleva mucho en Turquía.
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