Estuvimos cenando en la terraza de este...
Estuvimos cenando en la terraza de este restaurante un domingo por la noche, la verdad es que se estaba a gusto sentados ahí, y menos mal porque los camareros pasaban de largo como si tuvieran una pantalla a los laterales de la cara y les tapara los ojos y no podían verte. Estuvimos un buen rato viendo pasar a un camarero de un lado al otro de la terraza, y paso de nosotros como si no estuviéramos allí, conseguimos pedir gracias a que salió otro camarero del bar. La comida estaba buena, pedimos media ración de rabas, que estaban buenas, una croqueta que aun no sabemos de que era por que no sabia a nada, solo a masa de bechamel, y mi chico se pidió una hamburguesa que estaba buena, pero lo que era la carne no es que fuera abundante... Y yo me pedí un bocadillo vegetal con pechuga de pollo, la verdad que era un bocadillo de media barra de pan, y la verdad es q estaba bueno. Nos tomamos una coca cola y yo una clara, y como no la copita después de cenar un gin tonic y una copa de crema de orujo, todo eso por menos de 30€, barato así que no se le puede pedir mas.