de los mejores corderos que he probado
¿Te imaginas llegar a un restaurante y que a los 7 minutos de haberte sentado tengas una fuente de barro en la mesa con un magnífico cordero para dos esperando, sin siquiera haber pedido? Pues bien, el Figón Zute El Mayor no tiene nada más en la carte, así que no hacen ni que te molestes en pedir.
El sitio está enclavado en los soportales de la Plaza Mayor de Sepúlveda. Ese es precísamente el punto de "encanto" que ofrece el restaurante, el encanto. Porque su interior es absolútamente normal. Llegas (tras haber pedido mesa el día anterior, por supuesto), te sientan, te preguntan qué deseas beber (en nuestro caso cerveza) y a los 5 minutos uno de los camareros aparecer con la fuente de cordero. Ella me mira, yo la miro, los dos pensamos lo mismo. ¿Hemos pedido? ¿Nos han traído la carta? Rápidamente caemos, en este restaurante no hay carta, este es el templo de cordero, son los mejores, lo saben y no se andan con tonterías, jaja... Ah, bueno, detalle importante. Otros dos platos acompañan la mesa sin haberlos pedido, tampoco. Una cesta con un pan de pueblo que te hará soñar los días posteriores y una ensalada con una lechuga y un tomate de esas que te invitan a reflexionar: "por qué no me saldrán a mi tan bien...???".