En el centro de Hanoi, capital de Vietnam, se encuentra este restaurante, uno de los más visitados y recomendados en todas las guías turísticas. Su cocina es una mezcla de la francesa y vietnamita, sus precios no son exagerados para la calidad que ofrecen, el ambiente es agradable y ofrecen un buen servicio.
Este restaurante estaba cerca de nuestro hotel y como había leído la experiencia de otro viajero decidimos probar. Nos encantó.
Tiene una decoración colonial francesa, con muchas plantas, una luz tenue muy agradable y un servicio impecable. Es como un oasis dentro del caos y ruido de Hanoi.
La comida es vietnamita pero con toques europeos. Los postres estaban muy buenos. Está más enfocado para los turistas porque aunque para nosotros es barato para un vietnamita es caro. Nosotras éramos tres e incluso tomando una copa de vino nos salio por unos 20€ todo. Totalmente recomendable.
Llegamos por la descripción hecha en la nube. Tomamos un taxi y en mitad de una calle de caos, bajamos y nos adentramos en un patio interior tipo colonial francés con toques vietnamitas. Nada mas llegar, un hindú nos habló español y nos dio mesa. Tranquilo, música de ambiente, amabilidad en servicio y comida excelente. Música ambiente!! Pedimos Mouse de Foie, Raviolis Vietnamitas, Magret de Pato y Foundie de postre (tipo brownie, increíble!)
