Paseando por el centro de Mataró ...
Paseando por el centro de Mataró encontramos al final de La Rambla este restaurante. No teníamos referencias, pero sí mucha hambre, así que decidimos arriesgarnos. Fue sentarnos en la mesa y saber que habíamos acertado...
El local se encuentra en unaa calle estrecha, sin ningín interés. Por fuera parece un restaurante italiano del montón. Sin embargo, la decoración del interior (está en una antigua nave industrial) ya da algunas pistas de lo que aquí se cuece no es comida rápida, sino cocina italiana regional con un cierto aire de autenticidad.
Como el local, la carta es amplia y, como no, se basa en antipasti, pastas y pizzas, aunque hay platos más elaborados. La gama de pastas es muy amplia. Así como las salasas con que acompañarlas. Lo mismo con las pizzas: Buena variedad. El cuerpo nos pedía pizza, así que no puedo opinar sonre la elboración de platos más complejos, pero mi hijo pidió unos sencillos tortellini a la boloñesa que estaban de rechupete (por suerte para mí, nunca se termina sus platos). Las pizzas eran de gran tamaño. Al horno de leña y de masa finísina, casi una calcomanía.
