Restaurante Mas de Roures

Tenía referencias, aquí viene la gente desde Valencia exclusivamente para comer, no está cerca, por lo que las altas expectativas estaban ya hechas.
El sitio es un pequeño grupo de casas en la carretera, una de ellas alberga el rústico restaurante, con unas pocas mesas, y frente a la puerta una pequeña habitación guarda una chimenea en alto con sus brasas, porque aquí se viene a comer conejo y alcachofas a la brasa, entre otras delicias.

El servicio es familiar y super-amable, el sitio goza de un toque curioso, es como si estuvieras en casa de unos amigos aunque no hayas estado antes.

El mejor restaurante de la provincia de Castellon,
Cocina de mercado, buenas carnes, muy buen pescado fresco, un conejito pequeñito con all i olí impresionante, y como no, los 25 postres caseros, especialmente la tarta de queso y la de cuajada. .

Me encantó el sitio, muy acogedor, con 8-10 mesas, especializado en carne a la brasa, conejo a la brasa con Ali-olí, pan rústico a la brasa, una variedad de postres caseros y el carajillo, mh-m-m-m..

Servicio no profesional y lento.
Platos básicos sin adorno ni guarnición, fríos y pasados de cocción
Falta de atención y autocrítica.
Espacio reducido y agobiante, mucho ruido, no puedes mantener una conversación sin gritar
Precios aplicados en la cuenta no correctos, a favor de ellos.
No volveremos más ni recomendaremos.