Mafia impresentable
Estuvimos comiendo aquí, tres personas, todo correcto aunque muy caro.
Cuando pagamos con la tarjeta de crédito el camarero nos insistió en que tenían mala cobertura para el datáfono y que creía que no había pasado el pago; le dijimos que nosotros sí creíamos que había pasado pero ante su enorme insistencia y ante la apariencia seria del lugar decidimos (gran error) no buscar problemas así que les dimos otra vez la tarjeta.
Ya en casa comprobamos que nos habían cobrado dos veces. Llamamos y nos dieron largas. Hemos estado más de un mes llamando a estos caraduras, que se pasaban la pelota unos a otros para evitar hacer la devolución. En una ocasión incluso simularon haber hecho la transferencia para ganar dos o tres días más hasta que comprobamos que era otra mentira más de esta gentuza.