Lo mejor, las carnes
He estado ya tres veces en este restaurante y debo decir que siempre he comido de menú (unos 16€).
La comida es casera, pero exquisita. Destaco su sopa de ajo, sus revueltos, su churrasco y sus filetes a la brasa.
Lo peor es el servicio. Si hay poca gente comes sin problema, pero si tienes la mala suerte de entrar cuando esté lleno, tendrás que armarte de paciencia ya que son muy lentos atendiendo y sirviendo.