Restaurante con solera
Hacía muchos años que no habíamos ido al Vinatea y cuando decidimos ir a Morella, no buscamos restaurante, teníamos un buen recuerdo del Vinatea y fuimos directamente y nos encontramos con un restaurante completamente nuevo, reformado, con mucho estilo y una cocina de mucho nivel, sin dejar la cocina tradicional han sabido innovar con una cocina más actual y creativa. Platos bien elaborados y de excelente calidad, el fin de semana tienen dos menús de 25 y 35 €, nosotros escogimos el de 25, más tradicional, nos encantó, los entrantes, el ternasco y el bacalao exquisitos y como toque final sus postres, todo buenísimo, una cocina muy cuidada y bien elaborada, con una presentación perfecta y un excelente servicio muy profesional. El local está muy bien decorado, en el sótano se puede contemplar un bonito pozo y hay una extensa bodega. Fue muy agradable hablar con el propietario y saber que su hija está al frente de ese proyecto que es mantener el restaurante a este nivel.