Situado en un edificio de principios...
Situado en un edificio de principios del siglo XX, este bellísimo, coqueto y sensual restaurante ofrece unas vistas impresionantes de la ctedral de Chartres.
Tienen una concina tradicional francesa y además un pescado y marisco muy fresco, directo de las mejores pescaderias de la ciudad. Ofrecen menú diario y tienen una carta suculenta, muy bien elaborada. Nosotros decidimos empezar por una degustación de ostras con kirk royal. Sin palabras.
De los restaurantes con más "caché" que podaís encontrar si visitaís Chartres. Exquisita decoración y muy buena carta de vinos. Una atención muy personalizada y amable. De ambiente familiar.