Un lugar especial
Desde que entras en el Hotel Roca Negra te das cuenta de que es un lugar especial.
Líneas limpias, sencillas y rectas, contrastes de color, todo muy sencillo, muy zen. Visualmente, te enamora enseguida.
Fui a probar el Spa. Y qué decir… Magnífico. Tiene de todo. Además tuve la suerte de tenerlo entero para mí y nadie más, así que te puedes imaginar qué gustazo…
En mi habitación tenía una salida por la parte de atrás que da directa a la piscina, lástima no haber tenido tiempo para aprovecharme de una ventaja TAN grande.