San Vicente de la Barquera

Villa marinera que junto a otras del País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia representan a los pueblos costeros de pesca por excelencia.

San Vicente ha experimentado un mayor auge desde que un cantante (David Bustamante) se hizo famoso gracias a Operación Triunfo.

El pueblo tiene un afluencia turística en verano casi masiva, ya que se colapsa la carretera nacional que atraviesa el pueblo, los aparcamientos se rifan y las terrazas se llenan. Aun así es un sitio precioso, tanto con marea baja como con marea alta.

El resto del año se puede disfrutar de mayor soledad y

Entras por su puente de los deseos bañado por las aguas del Cantábrico. Su lonja y playas muy bonitas y la parte antigua con el Castillo del Rey y la Iglesia de San María de los Angeles. El rompeolas también os aconsejo que lo visitéis pero cuidado en día de temporal es peligroso.

Por último camino al rompeolas os topareis con la Ermita Barquereña con un colorido jardín a la entrada. Solo un pero, en época estival el aparcar está muy complicado.

Preciosa villa marinera, con gentes amables y simpáticas. Es digno de pasear junto a la ría y poder contemplar el espectáculo de la marea, que cuando es baja las barquitas de los pescadores descansan sobre la arena que horas mas tarde editar tapada por el agua.
Ni que decirse tiene que uno no puede marcharse sin probar el marisco y las delicias del mar que en sus restaurantes podréis catar ...

El día que nuestro camino pasaba por San Vicente de la Barquera estaba el cielo pintado de azul claro muy brillante, un azul que daba luz al pueblo con sus tejados de teja roja encendida y a la piedra de casas y calles que parecía relucir, y al mar, que entra tranquilo hasta el puente (parecía adornado de farolillos con esos pequeños barcos de colores), a la montaña, viva del verde es estas tierras cántabras. Y al marcharse el sol todo se tiñe rosado.
Mágico.

Fue un viaje corto, una fuga de la monotonía para romper con el ruido. La verdad que acertamos en todo y por todo, el hospedaje una Casa Rural Punta Liñera enclavada en lo alto de San Vicente, tranquila y sosegada, buen anfitrión su dueño.

Las cercanías impresionantes, los Valles del Pas, Puente Viesgo, donde quedan situadas maravillas cómo las Cuevas del Soplao o pueblos como Carmona (increíble), Comillas con su Capricho de Gaudí, Santillama del Mar comida por restaurantes y tiendas de souvenir, y que gracias a sus fachadas conserva algo de lo que fue. Celis, Pechón, Santoña santuario de la exquisita anchoa, e infinidad de aldeas que a juego con las montañas nos deleitan todo el camino.

Me toco un día de lluvia. Pero llueva, truene, haga sol, marea alta o baja... Uno de los pueblos más bonitos de España

"La más bonita de las villas marineras"

Así dice la canción y es que es totalmente cierto. Paso obligado si vas a Cantabria, disfrutar de su formidable bahía y tomar algo en cualquiera de los bares del pueblo siempre es un placer. Las principales playas se encuentran al otro lado de la bahía, nada que no solucione un breve trayecto en coche, ¡merecerá la pena!

Hablar de San Vicente de la Barquera es hablar de pesca, mar y ambiente.
Visitamos San Vicente de la Barquera en nuestra escapada a Cantabria tras visitas el Parque de la Naturaleza de Cabarceno.

Aunque a algunos no les gustaría ver el río con una marea tan baja, eso hizo que me enamorara más de este pueblo pesquero. Esta, con sus barcas amarradas a tierra, le dan un encanto especial.

Las calles adoquinadas del casco histórico esconden casas con mucho encanto, un castillo del siglo XIII, una iglesia y restos de la muralla entre otros rincones. Además, la costa de San Vicente y sus alrededores es conocida por ser una buena zona de surferos. Alguna vez tendremos que volver con mejor temporal para probar esto de subirnos a una tabla!