Un pequeño santuario oculto
El parque de Ueno, en Tokio, es un lugar repleto de museos y templos. Un lugar donde pasar un rato agradable explorando cada rincón. Sin embargo, muchos pasan por alto algunos de los lugares más recónditos de este parque, como es el caso del santuario Hanazoinari, cuyo acceso se produce a través de una serie de puertas torii que nos dan la bienvenida.
Este santuario es pequeño, pero cargado de encanto. El paso a través del pasillo de puertas torii, como una versión muy miniaturizada del famoso Fushimi Inari, nos conduce hasta el honden, el edificio principal del santuario. Es allí donde encontramos la habitual caja de ofrendas, donde los fieles depositan una moneda y proceden a ofrecer sus plegarias a la deidad. Que no te sorprenda comprobar que eres el único visitante: es una zona realmente tranquila, ideal para relajarse.