De vuelta a las tradiciones
Un interesante museo que nos invita a entender una de las actividades con más solera de la zona: la madera y los aserraderos. En una zona como la Selva Negra no es de extrañar que la explotación maderera fuera uno de sus pilares económicos.
El valle del río Kinzing que pasa justo por la bellísima Schiltach sirvió de motor para la industria de la madera. El museo nos muestra las vivencias de los profesionales del sector, los antiguos "balseros" que aprovechaban la fuerza del rio para transportar los fuertes árboles y también la fuerza de los aserraderos.
El museo se sitúa en dos edificios entre el rio Kinzing y un canal en el que fue antiguo aserradero, podemos ver todavía la maquinaria, así como deliciosas maquetas. En el edificio anexo se encuentra también el museo Gerberei que muestra otra de las actividades desarrolladas en el valle gracias a la fuerza del rio: las fábricas de curtidores.
El amable responsable me ha acompañado para explicarme el significado de este museo, y sobre todo que lo pudiera entender, ya que la información está en alemán. Una interesante parada que sirve también, para apreciar una de las iglesias más bonitas de la ciudad que se encuentra justo al lado, así como unas bonitas vistas al canal del rio Kinzing.
Si hay una cosa que me fascina de los museos que he visto a lo largo de mi viaje por la Selva Negra, es que la mayoría, o son gratuitos o tienen unos precios que permiten que puedas disfrutar de todos ellos.
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